Sin autor no hay obra.
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¿Mamà. que son los prìncipes azules? A los 6 años la niña le preguntaba a su madre.
-Son hombres increìbles y perfectos, pero no existen...Solo lo encuentras en los cuentos.
Lo habìa conocido en el pueblo de Foggia en Italia frente a las aguas del Mar Tirreno. Se sintiò amada, cuidada, por ese hombre unos años mayor y al que conocìa desde su misma infancia.
Se amaron casi un año con encuentro llenos de proyectos...Con pieles que se erizaban con solo tocarse.
Cuando hacìan el amor sentìan que cruzaban el ôceano con destino incierto. Los besos con movimientos en vaivèn terminaban en orgasmos donde todo parecìa irreal.
Nada podìa interponerse en esta relaciòn llena de amor. Cuando supo que estaba embarazada ambos corrieron por la costanera llenos de alegrìa.
Pero la sombra de su adicciòn al alcohol que habìa quedado atràs volviò y èl, se convirtiò en un despojo de lo que era.
Todo se derrumbò y ella se alejò con su hija por nacer hacia el norte de Italia tomando distancia de tanto desencanto.
Hoy èl està sufriendo, se volviò a alejar de esa sombra que lo persigue y lo lleva a la oscuridad y esta vez cree que para siempre. La buscò hasta encontrarla, quiere ver a su hija y pedirle perdòn a su amada.
Sì, su amada, porque cuando las tinieblas lo dejaron ver, no parò de llorar. Porque la amaba, porque sufrìa.
¿Mamà, quièn es ese el hombre que llama? Evadìa la respuesta pero algùn dìa tendrìa que enfrentar la verdad y volver a ver a ese prìncipe azul que volviò de las tinieblas. Entonces podrà decir: ¡Alguien al que quise mucho! y es...Tu papà.
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