Cuando se siente el sabor amargo en las bocas por el amor que muriò...Paola nos cuenta
Enrique Di Baggio
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El mundo se nos movió, amor. Lo nuestro se convirtió en excusas y tus palabras en sal que terminó corriendo por mis mejillas. Y se trasgiversó lo que tenía la pretensión de ser una historia de amor. Metimos forzadamente nuestras ilusiones y las pusimos frente a frente. Y empezaron los gritos en la calle compensados con besos apasionados escondidos entre nervios y desesperación. Consumidos.
Y ahora nos topamos en los pasillos con la lentitud del que quiere mirar una película pero no está seguro de si le gustará. Nos topamos como magnetizados por las esperanzas de lo que vimos que no resultó.
Y después seguimos de largo, cansados del sabor amargo en nuestras bocas. Vamos a encontrar algo mejor.
Lo nuestro se nos murió, amor.
Y ahora nos topamos en los pasillos con la lentitud del que quiere mirar una película pero no está seguro de si le gustará. Nos topamos como magnetizados por las esperanzas de lo que vimos que no resultó.
Y después seguimos de largo, cansados del sabor amargo en nuestras bocas. Vamos a encontrar algo mejor.
Lo nuestro se nos murió, amor.
—Paola E. Haiat
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