Piel con nombre

Escribí en tu piel mi nombre, dejando marcado para siempre nuestro amor.

Desde el primer día silencie el encuentro, para sostenerlo en el tiempo, cobijarlo y darle calor.

Tus ojos, con mirada cautelosa, prudente, hasta diría temerosa, provocaba mi rojez e intimidaba, no dejando pasar por alto mi timidez escondida.

El día de los besos fue eterno. Fué tan pero tan cercano el deseo, que rozó el aire, dejando todo tibio.

La única razón de mi recuerdo es que te necesito acá a mi lado, acá conmigo. Junto a mí.

Suelo pensarte y disimular mi dolor, mi angustia, la tristeza borracha y sin champagne.

Nadie debe saber que te amo en silencio.

AÚN TE AMO.

Mi piel tiene tu sello.  Mi piel tiene tus manos, mi piel está cubierta de tu piel.

Te recuerdo sonriente, feliz, con abrazos gigantes y besos de ternura.

Tus ojos brillan en mí porque son míos.

Vos sos mío, sólo para que pueda darte mi vida, mi esencia, mi demencia perdida.

Mi piel lleva tu nombre, pero en tu piel quedó mi marca.

WANDA ODESSA.

SIN AUTOR NO HAY OBRA.