Si pudièramos recordar esos momentos, las cosas no terminarìan...Paola nos cuenta
Enrique Di Baggio
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No sabemos cómo va a terminar, pero se va complicando cada vez que nos damos un beso que nos arranca la respiración, cuando de pronto se siente como si esto no tuviera fin: como si nuestro amor fuera a romper el ciclo natural de las cosas.
Porque mientras me abrazabas y mis piernas temblaban me pregunté a dónde terminaríamos, qué problema nos quebraría, quiénes seríamos para ese momento. Me pregunté si no podíamos congelarnos en el tiempo para permanecer con ese calor en el estómago por la eternidad.
Y me susurraste que me querrías para siempre y quería guardar esa promesa para cuando las cosas se pusiera insoportables.
Es que si pudiéramos recordar momentos así, con el corazón latiendo fuerte y las piernas temblando, las parejas no se separarían, las promesas no se romperían en el tiempo y el amor nos movería hasta los brazos del otro una y otra vez.
Porque no sabemos cómo va a terminar, pero siempre nos queda desear que no lo haga.
Porque mientras me abrazabas y mis piernas temblaban me pregunté a dónde terminaríamos, qué problema nos quebraría, quiénes seríamos para ese momento. Me pregunté si no podíamos congelarnos en el tiempo para permanecer con ese calor en el estómago por la eternidad.
Y me susurraste que me querrías para siempre y quería guardar esa promesa para cuando las cosas se pusiera insoportables.
Es que si pudiéramos recordar momentos así, con el corazón latiendo fuerte y las piernas temblando, las parejas no se separarían, las promesas no se romperían en el tiempo y el amor nos movería hasta los brazos del otro una y otra vez.
Porque no sabemos cómo va a terminar, pero siempre nos queda desear que no lo haga.
—Paola E. Haiat- Mèxico
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