MI ALUMNA -

AMIGOS:  El escrito que publico es de mi alumna que ustedes conocen: Sol Martin.

Me gustaría se tomen un tiempo para analizar la simplicidad profunda que tienen esas palabras. Habla sobre el pasado, el presente el futuro. Es para pensar, es para releer es un orgullo tener a Sol de alumna. Quería compartirlo con ustedes. Ni más ni menos que eso. Preguntemos: ¿Quién es el encargado del mañana? 
Recordemos que Sol tiene solo 16 años...

EL ENCARGADO DEL MAÑANA. (Yo)

¿A dónde va todo eso que se va? ¿En qué tierras se entierran los pensamientos perdidos? ¿Dónde van a perderse los recuerdos ahogados? ¿Con cuántos pétalos cuenta la marchita flor del olvido? Si el olvido es una flor que vuela con el viento llevando su aroma olvidado, descuidado ¿Cuáles son las tumbas en que se depositan sus cadáveres? ¿Cómo el olvido trasciende los espejos? ¿Cómo el recordar nos condiciona a vivir con unos millones de pétalos enterrados en nuestros cerebros, nuestros zapatos y brazos? ¿De qué nos sirve? ¿Qué provecho le extraemos a conocer el pasado más que para predecir el futuro? ¿Qué diferencia nos brinda el no saber qué nos pasó ayer? Si el futuro es incierto, pero el destino existe, ¿Quién es el encargado de escribirlo más que nosotros mismos? ¿Qué somos? El futuro, creo, es un invento del hombre, no existe. Y si el futuro existe, ¿No es hoy? ¿El ayer, no es hoy? ¿Mañana no será futuro? ¿Futuro es mañana? Y si el mañana no llega, o no lo alcanzamos… ¿Habrá existido alguna vez? ¿Habrá estado escrito y fue modificado? ¿O eso habrá estado predestinado? ¿Da el destino más vueltas de las buscadas? ¿Buscamos demasiado? ¿O no buscamos lo suficiente, y nos dejamos llevar por un océano masificado de espesas opiniones, trasgresiones y pasiones? ¿Será correcto dejarse ir por él? ¿Quién es quien define qué es correcto y qué no lo es? ¿Incorrecto? ¿Existe siquiera? ¿Qué impone el existir? ¿Existimos en un plano como si fuéramos un dibujo? ¿Nuestro existir se encuentra pentagramado? ¿La vida es un dibujo? ¿Es música? ¿Quién la dibujo? ¿Quién es el encargado de crearlos, si no nosotros mismos? Si no lo dibujamos, si no lo escribimos. Si nos olvidamos de escribir, ¿Adonde fue todo eso que se fue? ¿Se llevo el mar aquella flor? ¿Quién leerá este escrito cuando la campana me despierte y tenga que volver a tropezarme con la realidad?

Autor:

Sol Martin.

Sin autor no hay obra.