En este momento, creo que realmente te amo. Y estoy llorando por la dicha y temor que esto me produce, y porque todo viene cargado de tantas sensaciones que no puedo controlarme. Y me estoy mordiendo el labio inferior, y tomo respiros que me saben a recuerdos.
Y no tienes idea de cómo me muero por besarte. Pero creo que, en realidad, estoy deseando volver a todos esos momentos que no sabía lo que significarían hasta que he llegado a este punto de mi vida.
Y no, no los cambiaría, ni les agregaría nada. Pero muero por vivirlos una y otra vez. Con el sabor de tus labios y esas palabras que simplemente tengo ganas de escuchar por siempre. Con las ganas de abrazarte y tus brazos alrededor de mi cintura. Con tu cabello despeinado y esas pláticas eternas. Con tus manos, tus manos que son como una salvación cuando toman las mías.
Contigo. No con nadie más. Tengo ganas de que sólo seas tú para siempre.
SIN AUTOR NO HAY OBRA
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